Hay que ver cómo nos gusta la decoración con piezas especiales heredadas, o compradas en marcadillos, anticuarios, etc, que dan tanta personalidad a nuestras casas. Porque además las posibilidades para decorar con ellas son infinitas, y si se mezclan con una base escandi tan bonita como la de esta casa, el resultado es un éxito asegurado. Este dormitorio nórdico es la prueba viviente de que este mix funciona. La lámpara de lágrimas de cristal y el cuadro que hay sobre el cabecero son dos auténticas joyas clásicas que resaltan mucho más en un entorno tan sobrio y nuetro. Si te gusta, no te pierdas la selección de fichajes deco al final del post.
¡Feliz comienzo de semana!
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